Ponerle ilusión

Una de las cosas que me ha llenado de felicidad en el proceso de organizacion y preparación de la boda es como muchas de las personas involucradas directamente con la celebración del acontecimiento le han puesto un por ciento elevado de ilusión como si fueran ellos mismos los que se fueran a casar.

Desde los pajesitos, damas, madrina, padrino y demás miembros de la familia, todos con empeño tratan de que cada detalle quede perfecto.

Algunos se han sometido a cambios de color de pelo, otros tratan de perfeccionar el vestido que ya tenían elegido, los chicos se andan midiendo sus sacos, camisas y pantalones para estar elegantes. "Un verdadero desfile de preparación".

Hay una de las madres de las pajesitas que hasta permiso va a pedir en el trabajo el día antes para preparar su niña con antelación.

Ponerle ilusión a algo es hacer las cosas con amor, fijarse en los detalles y tratar de que salga lo mejor posible.

Es precisamente lo que he tratado de lograr para este día especial. No es que todo va a salir perfecto pero me encantaría que todo quede bien.

Hasta el momento no he sido la novia neurótica que anda peliando para que todo quede impecable, (cero que ver! jajaja) Gracias le doy a Dios por las personas que me han acompañado en este camino que codo a codo se han sacrificado para que sea simplemente una ocasión difícil de olvidar.